jueves, 25 de febrero de 2010

DOSCIENTOS TRECE

Sin apuntador, con un montaje en cada esquina. El mundo es un tablado. Nosotros creemos tener la letra aprendida, pero el guión es un capricho del tiempo y su pluma.
Igual vamos a buscar la ovación de un público que espera en el más alla.
Las gradas parecen estar vacías. El foco de cada día ilumina al héroe que no conoce su hazaña: vivir.

No hay comentarios: